El Inspector General Domingo Bronce se entrevistará esta semana con los propietarios de los boliches bailables de la zona con el objetivo de consensuar la metodología que se utilizará para aplicar con rigor las normativas vigentes.
Los dueños deberán instalar un cartel en el ingreso del local en donde se deje constancia de la capacidad máxima fijada por la habilitación. Si en los controles posteriores, que serán realizados por personal de Inspección, se detecta más gente en el interior del boliche que la permitida, se aplicarán multas que van de 10 mil a 100 mil pesos.
Bronce anticipó también a través de APA Radio San Pedro que se regirán por las leyes vigentes para impedir la entrada de menores a los boliches, pero que para ello intentarán convencer a los propietarios para que sean ellos los que realicen los controles en la entrada.