El teniente Héctor Marmo, su esposa y un grupo de inspectores municipales fueron agredidos por dos personas durante un incidente ocurrido tras una persecución como consecuencia de una picada.
El Inspector General Domingo Bronce relató que “anoche, a las 21 horas, recibimos denuncias de vecinos de Avenida 3 de Febrero sobre un auto que hacía picadas. Lo identificamos en 3 de Febrero y Sarmiento picando hacia General Belgrano y la patrulla intenta interceptarlo. El vehículo se da a la fuga hacia General Belgrano, toma hacia Ruta 1001 y luego en dirección a Mitre”.
Quien continúa el relato es el Teniente Héctor Marmo: “Venía por Ruta 1001 con mi mujer en la camioneta, estaba de franco, cuando siento la sirena. Doblo por Salta para darle espacio y en ese momento, a la altura de Ramón Rosa, me encuentra y siento un golpe en la camioneta desde atrás que me desacomoda. Entonces veo pasar un 147 blanco sin asientos y sin vidrios, y atrás el móvil de inspección”.
Marmo comenzó a seguir a los dos vehículos: “Lo empiezo a seguir con la camioneta a cien metros, agarran por Italia cruzan Pellegrini y Mitre en el aire y llegan hasta Ituzaingo, a veinte metros de Martín Fierro, en donde termina el FONAVI”. El vocero de la policía advirtió entonces a dos personas discutiendo con los inspectores municipales y amenazando con agredirlos: “Querían entrar el auto a un garage, entonces yo me paro en la vereda para que no lo ingresen. En ese momento sube una de las dos personas al 147 y me arrolla, me choca, y me tiró adentro del galpón. También a a un inspector lo golpeó en la rodilla, pero a mi me llevó hasta la mitad del galpón”.
El incidente no finalizó allí, sino que concluyó con una agresión a la esposa de Marmo: “Uno de los que se había bajado me viene a agredir en el suelo, pero interviene interviene mi mujer hasta que me pude parar. Trato de reducirlos y lo veo al otro chico que me tira un garrotazo, mi mujer pone el brazo y le pega con el palo, lo que le provocó una fractura en la mano”.
Los dos jóvenes hermanos, Sebastián y Marcos Sánchez, de 19 y 30 años, fueron finalmente detenidos, aunque liberados a las pocas horas.