Continúan los trabajos y desmienten robos en el buque “ARA Irigoyen”

El Director de Cultura, José Luis Aguilar, desmintió esta mañana, en el programa “La Mañana de APA”, las versiones sobre supuestos robos y venta de materiales pertenecientes al buque “ARA Irigoyen” amarrado en el muelle Nº 1, entre los cámpings América y Safari.
En el mismo programa, el presidente del Foro de Seguridad, Juan Gutiérrez, consultado sobre el tema, confirmó que tenía conocimiento sobre las versiones, pero no datos concretos: “Nos trajeron la información verbal de lo que estaba ocurriendo. Son todos trascendidos y pedimos pruebas porque nos dijeron que se está vendiendo el cobre, el bronce, el aceite, y necesitamos pruebas para confirmarlo”.
Gutiérrez adelantó que están buscando “a las personas que estén dispuestas a testificar y denunciar, ya que no pruebas hasta el momento para decir que alguien está vendiendo”. El dirigente puntualizó que “nos trajeron una información de que se está vendiendo el cobre, el bronce y se vende el aceite del barco”.
Aguilar, molesto con los comentarios, indicó que mantuvo esta semana una comunicación con Gutiérrez “porque alguien me había comentado que estaba este rumor, y para saber si ellos tenían alguna denuncia concreta, oficializada”. El Director de Cultura dijo estar sorprendido por estas versiones: “Me llama mucho la atención porque estoy en contacto con la Armada y tratando de reacondicionarlo para llegar al 25 de Mayo para que sea un ofrecimiento turístico de la ciudad y queremos invitarlos a todos a que vengan para que vean cómo estamos trabajando, y está abierto a todo aquel organismo oficial que tenga dudas del trabajo que hacemos”.
Específicamente sobre la venta de elementos, afirmó que “es imposible porque fue custodiado las 24 horas del día, primero por la Policía, y ahora por un régimen que la Municipalidad estableció de serenos a bordo del barco, que recorren la cubierta principal del buque”. Para despejar sospechas sobre los empleados, Aguilar aclaró que “estos serenos no tienen acceso tampoco al interior del barco, porque el buque tiene 14 puertas absolutamente herméticas y las llaves las tienen Cultura y el grupo de Veteranos de Malvinas. Nadie más que nosotros puede entrar a este barco”.
Para el funcionario municipal, el origen de los comentarios puede ser diverso: “Supongo que cuando este barco llegó, la Armada tenía la obligación de sacar elementos del barco como motores, repuestos que fueron para otro barco gemelo que está operativo. El capitán tenía un inventario y ellos limpian, hacen evacuación de hierros, de cables viejos y cosas inútiles y se lo tiran a un chatarrero. Supongo que si hay algún elemento que puede ser identificado con el barco y está en alguna chatarrera, ese es el origen”.
En relación a la supuesta venta de aceite, aclaró que “el barco tiene 18 tanques en donde llevaba combustible y agua de lastre” y que “el Municipio contrató por servicio a una empresa privada encargada de este tipo de trabajos, para que limpien el lastre y el aceite, a fin de evitar accidentes”.
Para evitar cualquier tipo de confusión, Aguilar sostuvo que “no podemos hablar sobre lo que no conocemos, hay que venir, conocer como es la embarcación y los trabajos que se están haciendo”.

Arreglos
En medio de la extraña situación generada por los comentarios mencionados, continúan las tareas de reparación en el buque y en el muelle.
La intención es finalizar los trabajos para el 25 de Mayo, y transformar el “ARA Irigoyen” en el eje de los festejos del Bicentenario.
Entre los sectores del barco que podrían estar listos para ese momento, de acuerdo a lo adelantado por el Director de Cultura, se incluyen la sala de navegación, una sala Hospital, la cubierta principal en donde se programarán espectáculos, primera cubierta y armamento, segunda cubierta y puente de mando, la Capilla de la Virgen Stella Maris, un microcine o sala de audiovisuales que llevaría el nombre de “Cabo Segundo Sergio Magliotti”, una sala de homenaje a Malvinas y otra de las campañas antárticas realizadas por el barco.
En relación a este último punto, se pusieron en contacto en los últimos tiempos un grupo de veteranos que fueron tripulantes en esas campañas antárticas.