Un grupo de ciudadanos solicitó hacer uso de la banca abierta en el Concejo Deliberante a fin de proponer un Proyecto de Ordenanza para declarar a San Pedro “zona libre de transgénicos”.
Iniciada por el lic. Enrique Hopman, la propuesta apunta a que la ciudad se manifieste en contra del uso de glifosato y sus co-adyuvantes, tal como lo hicieron otras localidades del país y del mundo.
Se trata de una iniciativa popular que tiene como objetivo principal “prevenir daños irreversibles a nuestra salud y de nuestros descendientes (…) siguiendo el ejemplo de San Marcos Sierra, en Córdoba primero y El Bolsón en Río Negro, después”, tal como citan en la nota elevada al HCD.
Los impulsores del proyecto proponen que se constituya una Comisión para trabajar en la redacción de un ante-proyecto de ley “ejerciendo el derecho como ciudadanos a tener Acceso a Productos Alimenticios Seguros, además de garantizar el Derecho de Precaución frente a los Organismos Genéticamente Modificados”. Asimismo, plantean “la consiguiente prohibición del uso, manipulación ó almacenamiento del glifosato y de sus co-adyuvantes para mejorar la absorción en la soja, como el Nonil Fenol Etoxilato, el insecticida Endosulfán, y de sus respectivos derivados; el AMPA y el sulfato de Endosulfán, el Randap y el 2-4D (pariente próximo del Agente Naranja) herbicida usado como defoliante en la guerra de Vietnam”, detallan.
La interesante propuesta tiene argumentos sólidos, y así lo hacen conocer los autores. “Sabemos que este modelo, que mercantiliza las riquezas naturales y genera una agricultura dependiente, responde a poderosos intereses transnacionales que atentan contra la soberanía de los pueblos y Estados”, señalan. “Este modelo mundial, del que recién estamos tomando conciencia como sociedad, amenaza la vida de la Tierra, agota el agua, destruye el ozono, produce calentamiento global y ha sumido a las dos terceras partes del mundo en la pobreza. Ha enriquecido a pocos, a costa de la salud, la vida y felicidad de las comunidades locales y de los pueblos originarios”, especifican.
Para los impulsores, “sólo la política puede compensar las desigualdades y modificar los escenarios y correlaciones de fuerzas vigentes”. Por esa razón, proponen un modelo de Ordenanza que en primer lugar, prohíba “en todo el ejido municipal la producción y cultivo de Organismos Modificados Genéticamente (OMG)”. En segundo lugar, postulan que se declare a San Pedro “Zona Libre de Transgénicos” para la producción y cultivo de OMG.
Además, la intención es comunicar sobre la medida a los demás municipios de la región como San Nicolás, Ramallo, Exaltación de la Cruz, Baradero, Zárate, Carmen de Areco, San Andrés de Giles, San Antonio de Areco, Arrecifes, Salto, Pergamino, Rojas, Capitán Sarmiento y Colón. En caso de que esas ciudades adhieran a la norma o sancionen alguna semejante, la idea es “coordinar una reglamentación que integre objetivos e instrumentos de contralor y sanción”.
La iniciativa ya ingresó por mesa de entrada del cuerpo legislativo; ahora, deberá ser incorporado en el orden del día para su tratamiento.