El ex Jefe Departamental, José Aurelio Ferrari, prestó declaración indagatoria esta semana ante el titular del Juzgado Federal Nº 2. Lo hizo en el marco de una investigación por actitudes improcedentes contra un detenido por un caso de secuestro extorsivo.
Ferrari fue acusado por el Fiscal Federal Juan Patricio Murray después de los dichos de Oscar Branchini, acusado y procesado en el denominado Caso Bernardotti, ocurrido en San Pedro en 2002. Meses después de su aprehensión “Maradona” Branchini dijo que Ferrari lo interrogó en una dependencia policial. El Ministerio Público Fiscal entiende que el funcionario policial se excedió en sus funciones, y procesó también al Comisario Britos, jefe policial de la Comisaría de San Pedro en ese momento, por facilitar la acción.
Trascendió que ambos imputados dieron su versión de los hechos en el las acciones que llevaron al esclarecimiento de ese resonado caso.
En el caso de Britos, el numerario policial habría indicado que no estaba en la dependencia cuando se habría producido el interrogatorio.
Ferrari ante las pruebas presentadas sostuvo que no obligó ni dirigió ningún interrogatorio, y que fue espontáneamente Branchini quien dio detalles de las maniobras que urdió su cómplice, María Fernández Fusi, para plagiar, pedir el rescate y mantener cautivo al rehén.
Sin entrar en mayores detalles José Ferrari manifestó que “se puso a disposición de la Justicia” y espera “que rápidamente se aclare la situación”. Negó “haber forzado al detenido a efectuar ninguna declaración” y que el esclarecimiento del hecho se dio en forma rápida y “tras una prolija investigación”.
Para el Juez Federal Villafuerte Ruzo comenzaron a correr los plazos procesales para determinar la situación de ambos imputados.
[Información y foto "Diario El Informante"]