La aparición de numerosas especies de peces muertos a la orilla del río Paraná causó preocupación en pescadores y habitantes de zonas como Bajo Puerto y el camping Mansa Lyfe.
El episodio comenzó a registrarse en los últimos días, luego de que la situación fuera advertida en otros puntos del sur de Santa Fe y Entre Rios.
Pero la elevada mortandad de peces tiene una explicación. Según informó, en declaraciones al programa Diez Puntos (Radio 2 de Rosario), el prefecto de Arroyo Seco, Néstor Kiferling, los animales fallecieron por estrés térmico. El diagnóstico fue elaborado junto a la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la provincia de Santa Fe.
Tras varias denuncias de habitantes de la ribera del Paraná sobre la presencia de centenares de peces muertos, se llevó a cabo una investigación de parte del gobierno provincial que arrojó un resultado: las especies de la zona fallecieron por estrés térmico. Según indicó Kiferling “en períodos con temperaturas extremas, tanto bajas como altas, suele aparecer mortandad de peces en el río”.
Para ratificar esta versión el biólogo Norberto Oldani dialogó con LT39 de Victoria (Entre Ríos), quien señaló que el descenso de las temperaturas es la principal causal de la muerte los peces. El biólogo, investigador del Instituto de Desarrollo Tecnológico para la Industria Química (UNL/Conicet), expresó que “es un fenómeno absolutamente natural que en nuestros ríos los peces se mueren en invierno. Esto ocurre desde que yo era chico. Cuando la temperatura del agua baja de 12º los peces se mueren. Hemos tenido una mortandad importante este año desde Helvecia hasta el río de La Plata”.