Condolencias de Sociedad Rural por la muerte Luciano Miguens, fundador de la Mesa de Enlace

La Sociedad Rural de San Pedro compartió sus condolencias con la familia y amigos de Luciano Miguens, ex presidente de la Sociedad Rural Argentina.  El dirigente agropecuario y criador de caballos criollos marplatense tenía 85 años. 

Mario, trabajador explotado: “No nos dejaban salir, ni conversar entre nosotros”

Mario, uno de los trabajadores explotados en el campo “El Algarrobo”, habló esta mañana a través de APA Radio San Pedro desde la habitación en el Hospital donde se encuentra internado.
El jornalero fue picado por una araña hace casi una semana. “Hace más de cinco días que me pasó esto, y el capataz lo sabía, pero me dijo que me muera, y después le avisé al Ingeniero, que no hizo nada” explicó.
Mario dijo no saber qué edad tiene, ni cuánta gente estaba en el campo, aunque aclaró que llegó junto a su hermano y que su madre quedó en Santiago del Estero con otro hermano, discapacitado. Además, explicó que la mayoría de los trabajadores provenían de Termas de Río Hondo, y fueron reclutados por una persona que no era del lugar.
Al ser consultado sobre el arreglo económico que tenía, aclaró que no había acordado nada con la gente que lo trajo desde su provincia, y que no sabía cuánto iba a cobrar. El año pasado, recordó, percibió 2.500 pesos por tres meses de trabajo. El régimen era de 10 horas diarias, todos los días de la semana, incluyendo sábados y domingo. El trabajo no se interrumpió el día de Navidad.
“No se cuántos éramos, porque no podíamos hablar con los de las otras cuadrillas, ni andar por el campo, y tampoco salir” explicó Mario, quien relató que cuando sus compañeros quisieron escaparse “el capataz se enojó mucho”.
Si bien aclaró que no es la primera vez que venía a San Pedro, ésta es la primera oportunidad en que trabajan en “El Algarrobo”.
Acerca de las denuncias adjuntadas a la causa, confirmó que la comida la llevaba “un hombre que iba en una camioneta, un proveedor” y que “es cierto” que había mercaderías vencidas.
Además, ratificó que el capataz les cobraba 2 pesos por cada vez que querían cargar la batería del celular para comunicarse con sus familias.