Condolencias de Sociedad Rural por la muerte Luciano Miguens, fundador de la Mesa de Enlace

La Sociedad Rural de San Pedro compartió sus condolencias con la familia y amigos de Luciano Miguens, ex presidente de la Sociedad Rural Argentina.  El dirigente agropecuario y criador de caballos criollos marplatense tenía 85 años. 

Barbieri y otros 42 Diputados no hablaron durante todo el período legislativo

Cuarenta y tres diputados, entre ellos Mario Barbieri, no emitieron palabra alguna a lo largo del año pasado, de acuerdo al informe anual que elabora el sitio web “parlamentario.com”. En contrapartida, Agustín Rossi, emitió a lo largo del año legislativo 56.435 palabras en el recinto, mientras que el titular de la Cámara, Eduardo Fellner, sumó 43.689.
Quienes no hablaron en todo el período legislativo son los oficialistas Octavio Argüello, Carlos Donkin, Gustavo Dutto, María Teresa García, María Laura Leguizamón, Timoteo Llera, Juan Carlos Lorges, Marta Quintero, Evaristo Rodríguez y Juan Carlos Sluga.
También aparecen en cero los radicales Lucio Aspiazu, Mario Barbieri, Atilio Benedetti, Juan Francisco Casañas, Hugo Castañón, Jorge Omar Chemes, Eduardo Costa, Gustavo Cusinato, Héctor Del Campillo, Gladys Espíndola, Pedro Molas y Agustín Portella.
Por el peronismo disidente no hablaron Juan Carlos Forconi, Natalia Gambaro, Patricia Gardella, Estela Garnero, Daniel Germano, Jorge Montoya, Jorge Obeid, Raúl Rivara, Claudia Rucci y Nora Videla.
Del PRO no habló Soledad Martínez, como por la Coalición Cívica quedó en cero Hilma Re, en tanto que del Frente Cívico de Santiago del Estero, aliados del kirchnerismo, no hablaron cuatro de sus ocho miembros: José Alberto Herrera, Ana Luna de Marcos, Mirta Pastoriza y Jorge Raúl Pérez.
Tampoco hablaron, como ya dijimos, los fallecidos César Albrisi, Luis Fernández Basualdo, Néstor Kirchner y Ramón Ruiz.
Carlos Donkin asumió hacia fines de año por Fernández Basualdo, y Gustavo Dutto por Ruiz, quienes tampoco hablaron, pero participaron de pocas sesiones. Aunque en el mismo caso se encuentra el reemplazante de Kirchner, Edgardo Depetri, quien emitió 1.501 palabras. Antes de mediados de 2010 asumió Daniel Asef (1.484 palabras) en lugar de Albrisi.
Vale mencionar también a Jorge Rivas, quien es recordado como un gran orador, pero hoy participa de todas las sesiones, aunque está impedido de hablar, por encontrarse imposibilitado desde el ataque que sufrió en el año 2007.
Por el Frente Cívico de Santiago del Estero, la mitad de los integrantes no emitió palabra alguna en el recinto. Pudieron ser la mitad más uno, a no ser porque en la última sesión del año, la preparatoria de diciembre, Cristian Oliva expresó 34 palabras. Algo es algo.
El radical pampeano Eduardo Kenny figura con apenas diez palabras. Hay lugar para transcribirlas: “Solicito que quede constancia de mi voto por la afirmativa”.
Peor fue lo de Juan Carlos Dante Gullo, un dirigente de buena presencia en los medios, donde suele exponer su ágil oratoria, que sin embargo este año dijo apenas tres palabras: “Sí, señora presidenta”. Fue en respuesta a Patricia Fadel, quien le preguntó si permitía una interrupción pedida por Federico Pinedo, y luego ya no volvió a hablar, según consta en los archivos taquigráficos. En esa sesión había acordado con la diputada Silvia Vázquez compartir el tiempo de una fundamentación. Otra vez será.
Trece diputados figuraron en cero también el año anterior: Octavio Argüello, María Teresa García, Patricia Gardella, José Alberto Herrera, María Laura Leguizamón, Timoteo Llera, Juan Carlos Lorges, Mirta Pastoriza, Jorge Raúl Pérez, Agustín Portela, Evaristo Rodríguez, Ramón Ruiz y Juan Carlos Sluga.
Precisamente este último, Sluga, cumple así seis años sin hablar, todo un récord. Francisco de Narváez, que llevaba tres años sin hacerlo, habló este año en la sesión sobre las salideras.
Tres años sin palabras cumplen José Alberto Herrera, María Laura Leguizamón, Timoteo Llera, Jorge Raúl Pérez y Evaristo Rodríguez.
El que estuvo locuaz para su costumbre fue el kirchnerista Carlos Kunkel, quien suele hablar poco y en general sin pedir la palabra. Este año lo hizo varias veces, sumando 1.253 palabras. Claro que, fiel a su naturaleza, también tuvo su cruce correspondiente con un colega. Según consta en las versiones taquigráficas, en la reunión 17° le gritó al radical Gustavo Serebrinsky un contundente: “¡Callate, caradura!”.