El diario "Clarín" informó que una comisión de Asuntos Internos investiga la denuncia por golpes al ladrón internado en el Fiorito.
Hoy "estuvieron en el hospital y se llevaron el cuaderno en el cual los policía asentaban los cambios de guardia y las visitas" que recibía el joven de 19 años que estaba a punto de ser dado de alta y sufrió un deterioro físico que lo dejó en estado crítico y por el cual su familia denuncia "torturas" en una fiscalía de Avellaneda.
La noticia se conoció hoy y fue confirmada por la misma policía Bonaerense a Clarín.com, como también que el fiscal Alejandro Rojas, de la UFI N° 3 de Avellaneda, "ya envió a un médico forense y pidió la historia clínica" de Jonathan Alí, el detenido que había llegado al Fiorito con custodia, y estaba esposado a la cama, para ser sometido a una operación de la columna luego de haber cometido un asalto en San Pedro a tres personas, entre ellos un agente.
El caso Alí trascendió ayer cuando, por medio de un comunicado, la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (Cipoc) denunció que la Policía era "la responsable" de que el detenido pasara de estar a punto de recibir el alta a un cuadro gravísimo que derivó en una nueva intervención quirúrgica. "Todo lleva a pensar que fue sometido a una feroz golpiza mientras se recuperaba de la primera intervención", decía el comunicado.
Sin embargo, desde el hospital y fuentes policiales desmintieron la versión de la agresión. El Jefe de Terapia Intensiva del hospital Fiorito, Antonio Conforti, dijo: "No hay ninguna evidencia de eso que explique el cuadro del joven. Pudo ser una úlcera obstruida, pero no es consecuencia de maltrato, porque de ser así debería haber sido un trauma demasiado severo".
Mientras que, desde los altos mandos de la Bonaerense en Avellaneda, hoy reconocieron que fueron ellos mismos quienes informaron a Asuntos Internos para que investigue el caso.
Todo comenzó el miércoles pasado, cuando la familia de Alí, que retornó a San Pedro para recibirlo por la inminente alta médica pese a que iba a ser derivado al penal de Magdalena, se enteró que el joven estaba en estado muy crítico.
Alí había sido derivado al Fiorito por una herida de bala en la columna sufrida en el asalto que había perpetrado el 10 de octubre. Sin embargo, el miércoles 19 sus familiares lo hallaron con un ojo "con un hematoma" y operado de una perforación en el duodeno, en terapia intensiva y, luego, con un cuadro generalizado de sepsis.
"Primero, en el hospital le dijeron a la familia que se había caído de la cama, después que lo ese cuadro (el estallido del duodeno) era producto de una esquirla de la bala y que, como eso les generaba duda, el director del Fiorito sólo se limitó a hacer un parte en la comisaría (1ª de Avellaneda). Formalmente no quisieron decir que lo habían golpeado, pero se cae de maduro", explicaron desde la Correpi (Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional).
Hoy, a Alí lo intervinieron de urgencia nuevamente por una complicación en su cuadro general, y aunque salió bien, su estado sigue siendo crítico.
Información diario "Clarín"
