La concejal Noemí Bordoy presentó un proyecto de resolución por el que “censura y repudia enérgicamente la medida del Tribunal de Casación de la Provincia de Buenos Aires, Sala 1 en la reducción de la condena al victimario de Dirlene Vieira”.
El polémico fallo del Tribunal de Casación, cual reduce la condena impuesta a un hombre que mató a su mujer, abriendo un debate jurídico que involucra cuestiones como la igualdad de género y los prejuicios que pueden llevar a eventuales pronunciamientos discriminatorios.
El caso se inicia en el año 2007, cuando un joven asesina a su pareja con un martillo y un cuchillo de cocina, siendo condenado a a 17 años de prisión por un tribunal de San Isidro.
Apelando la medida a Casación, en septiembre de este año, este tribunal le bajo sustancialmente el monto de la pena, fijándolo en 10 años y tres meses.
La concejal Bordoy expresa que “os argumentos esgrimidos por el juez Biombo, quien votó la rebaja de la condena , resultan a todas luces, sorpresivos e indignantes, ya que textualmente expresa “ la favorable impresión personal que le causo el homicida al tribunal, y en otro párrafo añade” a eso debo aditar la actitud casi provocativa que la victima venia exhibiendo al momento de producirse el altercado final” , y sostiene que “ se ha confundido una emoción violenta con un ataque patológico de celos de tinte pasional”
Para la edil “de tolerarse este fallo , estaríamos retrocediendo al menos treinta años en el abordaje de la problemática de la violencia de género, ya que en esta decisión influyo un prejuicio en contra de la victima, por su condición de mujer., en la cual la influencia de los patrones culturales de discriminación dan como resultado una descalificación en la credibilidad de la victima, y una asunción tácita de la responsabilidad de ella por los hechos, ya sea por su forma de vestir, hablar, ocupación laboral, conducta sexual etc”.