El jueves 21 de junio,
productores y profesionales frutícolas están invitados a conocer el trabajo e
intercambiar opiniones sobre la experiencia del INTA junto a la Empresa Citrícola
Baradero.
La reunión a campo, en la que se
compartirán los resultados de esta práctica, se realizará en el Establecimiento
“Los Cachorros”.
En el marco de las actividades
del Proyecto Regional de Producciones Intensivas, desde hace dos años el INTA
está realizando el seguimiento de una experiencia productiva específica en Baradero.
Un equipo interdisciplinario realiza visitas periódicas para trabajar distintos
aspectos que se definieron en conjunto con los propietarios de la empresa y su
asesor técnico. En esta oportunidad se compartirán los resultados obtenidos a
partir de la realización de prácticas de poda y raleo de frutos efectuados en
lotes de duraznero. Se comentarán cuáles han sido las características de las
prácticas desarrolladas, los resultados productivos y se complementará con
valores de costos de producción. Finalmente habrá actividades referidas al
reconocimiento y observación de Piojo de San José, formas de monitoreo para
poder evaluar la intensidad de un ataque y cuestiones básicas referidas al
control de esta cochinilla.
Gabriel Valentini es uno de los
profesionales involucrados en la tarea y explica: “La diferencia de la
experiencia con respecto a situaciones tradicionales de ensayos o experimentos
establecidos en campos de productores, pasa por la condición inicial que plantea
la ejecución de prácticas que se acuerdan entre el productor, su asesor y los
técnicos del INTA. En este caso, los acuerdos están signados por las
características estructurales de la empresa y la necesidad de considerarla
integralmente.
A partir de aquí, aparecen muchas
veces distancias entre lo ideal -lo deseable- y lo posible, que marcan la
realidad de la situación”. El técnico del INTA también expresó la dificultad
que representa esta tarea, cuya dimensión “se va ajustando con la marcha y
presenta obstáculos y dificultades, quizás, impensadas o subestimadas en un
principio”. Valentini rescató el valor de esta experiencia que permitió
“conseguir resultados que no sólo están ligados a cuestiones productivas sino
también a una contribución en la integración entre los actores de la cadena”.