Un singular elemento utilizado
por los colonos rurales de la zona durante el siglo pasado fue donado al Museo
de Tecnología Agropecuaria, de Gobernador Castro.
La familia Gallina, del Paraje
“Las Flores”, acercó una fragua hormiguicida marca Roma Patente 39088, un
elemento muy utilizado en los campos de la zona para combatir a la hormiga
negra o podadora (Acromirmex sp.)
El curioso e ingenioso aparato,
de 77 cm
de alto, 60 cm
de largo y 44 cm
de ancho, se componía de una pequeña fragua manual de molinete para insuflar
aire unida a un recipiente vertical donde se colocaba el veneno. Todo era
soportado por un trípode de hierro.
En el fondo de dicho recipiente
se colocaba carbón encendido y en una pequeña plataforma superior, se ponía,
principalmente, arsénico. Al calentarse, éste liberaba gases muy venenosos que
eran impulsados hacia una boca de salida, la cual estaba conectada a una
manguera que se introducía en el hormiguero que se deseaba eliminar.
La alta toxicidad del arsénico
combinada con los gases del carbón producía la mortandad de los insectos pero
implicaba, además, un riesgo para quien manipulaba el objeto.
Si bien en la máquina donada por
la familia Gallina no se conserva la parte del molinete, presenta un buen
estado general donde se aprecian, incluso, el detalle de la marca, número de
patente y modelo de forma clara y en relieve.
Integrantes del Grupo
Conservacionista realizaron la limpieza, restauración y pintura de la misma
respetando el color verde noche con que estaba cubierta originalmente.
En los próximos días, este objeto
pasará a engrosar la colección del Museo y será ubicado en la Sala de los Colonos.