Una mujer policía fue brutalmente golpeada ayer por la tarde en su vivienda, en uno de los casos de violencia de género más graves ocurridos en San Pedro en los últimos tiempos.
El principal sospechoso del ataque, su pareja, también es un efectivo policial, y está sumariado y procesado por disparar al rostro de una persona con postas de goma, provocando que perdiera uno de sus ojos.
Otros detalles, como la participación de una tercera persona, también policía, un presunto abuso sexual y la forma en que la mujer y una de sus hijas, de dos años, ingirieron psicofármacos, se encuentran en plena etapa de investigación.