Durante el fin de semana, nuevamente, se produjeron daños y robos en la cancha del Club Defensores Unidos, ubicada en San Martín y Depietri.
En esta ocasión se llevaron, tal como había sucedido en ocasiones anteriores, parte del cableado para la iluminación de la cancha, y destruyeron las luminarias. Las pérdidas estimadas rondan los 7 mil pesos.
“Ya hace un tiempo que venimos sufriendo robos. Nos rompen los vestuarios, se llevan lo que hay adentro, se han robado todos los cabes y se llevaron todos los reflectores.
No podemos hacer más nada porque todo lo que ponemos lo rompen o lo roban” reconoció Alberto Díaz, integrante de la comisión de fútbol de la institución.
“Cuesta mucho, es mucho el trabajo, el esfuerzo para poder sacarlo adelante y estamos siempre en la misma. Nos han robado los cables, entraron a los vestuarios y se llevaron ropa, pelotas, herramientas…” reseñó el directivo.
El principal problema se origina, ahora, en la imposibilidad de entrenar de noche, horario en el que pueden reunir a todos los jugadores.
Díaz estimó que, en lo que va del año, se invirtieron más de 60 mil pesos, con escasas posibilidades de recuperación.
Un partido de primera jugado como local, precisó, puede dejar en boleterías alrededor de 2.000 pesos, un monto que no alcanza para cubrir los costos del encuentro.