Decenas de prestadores turísticos se reunieron esta noche en uno de los salones del Centro de Comercio e Industria, con el objetivo de coordinar acciones contra el nuevo cálculo de la tasa que deben tributar al Municipio.
Las modificaciones incluidas en la Ordenanza Fiscal, que obligarían a pagar costosos aranceles por cada persona que se aloje en un hotel, en una cabaña, en un cámping o sea atendido en un bar, se votarían en la sesión extraordinaria de mañana.
Los comerciantes estuvieron acompañados por los abogados Daniel Spirópoulos y Pablo Visca, quienes los asesoraron acerca de las medidas judiciales que iniciarán la próxima semana, en busca de que no pueda aplicarse la norma, a la que consideran inconstitucional.
Se propuso en la reunión que el Centro de Comercio se presente como querellante, aunque el representante de la entidad, Roberto Seregni, les recomendó constituirse como cámara para tener más fuerza en el reclamo.
El malestar de los prestadores fue tal que uno de ellos, propietario de un importante bar del centro de la ciudad, anticipó que declarará como personas no gratas en su negocio al Intendente y sus funcionarios, y dejará de atenderlos.
El Director de Turismo, Fabián Bianchi, presente en la reunión, prefirió no dar a conocer públicamente su posición sobre el tema, aunque dejó entrever su desacuerdo con el texto de la Ordenanza Impositiva al afirmar: "Ustedes saben lo que pienso".
