El Director de Bromatología, Saverio Gutiérrez,
se refirió esta mañana a las condicionas en que fueron decomisados más de 400
kilos de pastas frescas y otros productos en un camión que transportaba esa
mercadería a comercios de nuestra ciudad.
“Ingresó con 18 grados de temperatura, cuando
lo máximo que permitimos, como límite, es de 8 grados” dijo Gutiérrez.
“Ya se le había notificado a esa empresa, porque
otras veces habían pasado sobre el límite” agregó
La mercadería decomisada fue destruída. “Cuando
hay mercadería que puede ser aprovechada se entrega a la Fundación Animal,
pero en este caso se entierra o se incinera” explicó el funcionario.
La repetición de este tipo de episodios
representa una preocupación para las autoridades del área: “Es una lucha
permanente para que mantengan las condiciones sanitarias. A través de los años
los camioneros agarraron mañas que son muy difíciles. Pero tienen que entender
que cuando son productos refrigerados, y más las pastas que se deterioran muy
rápidamente, hay un riesgo para la población” precisó Gutiérrez.
La responsabilidad, y la consecuente multa,
serán aplicadas a la empresa propietaria de la mercadería, en este caso
“Anthony”. “Generalmente estas firmas no tercerizan el servicio, son vehículos
propios, salvo de los grandes supermercados. El responsable es la empresa por
sus representantes en la zona” indicó.
Consultado sobre las precauciones que deben tener
los consumidores finales para detectar si las pastas que se venden en un
comercio o supermercado están en condiciones, el Director de Bromatología explicó
que “lo más importante es que la pasta nunca tiene que estar mojada, aunque si
húmeda”. En el mismo sentido, detalló que “entran muchas caja de pasta de
cartón, que no tienen que estar mojadas, y las que son de plástico pueden tener
una pequeña condensación, pero no reunir mucho agua dentro del paquete”.