Descubren el fósil de un bagre de 200.000 años de antigüedad

Un equipo del Museo Paleontológico de San Pedro realizó un nuevo hallazgo de gran relevancia en el yacimiento de “Campo Spósito”: el fósil de un bagre de 200.000 años. La pieza, parte del cráneo del pez, fue descubierta durante tareas de muestreo en el Bajo del Tala que realizaban  José Luis Aguilar (Director del Museo Paleontológico de San Pedro), la Dra. Analía Forasiepi (IANIGLA-CONICET) y el Sr. Damián Voglino (el primero en observar el fósil en el terreno),  Este nuevo descubrimiento refuerza la teoría de que la zona fue un río prehistórico, lo que abre nuevas perspectivas para comprender la fauna y el ecosistema de la región durante el Pleistoceno medio. El pequeño hueso, de apenas 2 centímetros, proporciona valiosa información sobre las características del curso de agua y las especies que lo habitaban.

Asaltan y golpean al dueño de un geriátrico: se llevaron dinero, una cámara y celulares

Foto "El Diario de Baradero" 
El Dr. Julián Gómez, propietario de un geriátrico ubicado en San Martín al 1800, fue asaltado y golpeado ayer a las 7.30 mañana por tres delincuentes que ingresaron a la casa en la que habita.
Gómez se encontraba, al momento del hecho, con su esposa, dos de sus hijas y una nieta de un año cuando fue abordado por los delincuentes, que portaban una escopeta recortada y dos cuchillos, con los que amenazaron al médico para que le entregara dinero y otros elementos.

En declaraciones a APA Radio San Pedro, el profesional detalló lo sucedido: “A las 7.30 entraron a nuestra habitación tres encapuchados jóvenes, no más de veinte o veinticinco años, me intimidaron, me ataron, me golpearon, exigiendo la entrega de dinero. Así por espacio de veinte minutos”.
El propietario del geriátrico  consideró que los delincuentes “conocían bien el lugar” y aclaró que “las conjeturas las hago porque había uno de ellos que no hablaba para que no le conociera la voz, y era evidente que conocían el lugar y como ingresar a mi habitación”.
Los ladrones, indicó Gómez, se fueron del lugar diez minutos antes de la entrada de los empleados y familiares, y conocían la disposición de las cámaras: “Intentaron esquivar las cámaras, las desenchufaron y también rompieron el botón de pánico”.  
Los abuelos del geriátrico no advirtieron la situación hasta que terminó el asalto: “Si bien es todo un edificio, el estar nuestro está separado de las habitaciones de los pacientes, que ni cuenta se dieron hasta que escaparon por una ventana que extrañamente estaba abierta”.
Los asaltantes huyeron con dinero en efectivo, tres teléfonos celulares y una cámara fotográfica.