Dos nuevos hurtos de motorodados
fueron denunciados ayer por los damnificados.
El primero de los casos fue
descubierto a las 18.30, cuando un joven de 22 años, dueño de una Gillera
Smash, se encontró con que no estaba en la vereda de Beaumont 135, tal como la
había dejado.
El vehículo estaba exhibido en
el lugar para la venta, y estaba pintada con colores rojo y negro.
Un rato antes, entre las 15 y las 16, delincuentes
se llevaron una Zanella Sol de 50 cc de color violeta, perteneciente a una
mujer de 26 años.
En este caso, los ladrones
ingresaron al pasillo de la casa de su amiga, ubicada en Sargento Cabral 54,
para robar el vehículo.