Sabrina Juárez, madre de la beba
encontrada sin vida en una letrina en su casa de Gobernador Castro, recuperó la
libertad en las últimas horas, al no poder probarse si la niña nació muerta o
con vida.
Los análisis
anatomopatológicos practicados en base a las muestras extraídas del cuerpo de
la pequeña no dieron resultados concretos, por el avanzado grado de
descomposición que presentaba en el momento de su hallazgo.
La mujer permanecía detenida
en la Comisaría de la Mujer de San Martín, y fue liberada en las últimas horas,
regresando a su localidad natal, tal como lo habían anticipado los vecinos.
Juárez estaba imputada por
“homicidio calificado por el vínculo”, tras su detención, el 10 de Junio, luego
de que las primeras pruebas sumadas al proceso la identificaran como la
principal responsable de los hechos.
En un primer momento se
informó que la niña fue arrojada con vida al pozo ciego poco después de nacer, y
habría muerto, al menos 24 horas después, por inanición.
En la vivienda se secuestraron
una toalla con restos de sangre y en estado de putrefacción, y partes de la
placenta.
El Dr. Marcelo Manso, Fiscal
que investiga el hecho, había informado ese día que, de acuerdo a la
información suministrada a través del informe del médico forense, “el cordón
umbilical habría sido cortado, y el bebé habría tenido posibilidades de
respirar”. El Fiscal dijo que “eso
transforma radicalmente el hecho” aunque reconoció que hay que esperar los
resultados finales de la autopsia.
“Hicimos la autopsia al bebé y si bien no es
automática, nos sirve para tener una información en este momento de la
diligencia, con la evaluación de lesiones traumáticas” indicó el abogado.
El titular de la UFI 5 aclaró
que “luego vienen los estudios complementarios, entre ellos el
anátomopatológico, que nos permitiría saber si los pulmones tienen aire, y eso
nos confirma que tuvo sobrevida después del parto”. Ese es el punto en que la
causa se trabó, puesto que el estado de descomposición de los órganos impidió
que se precisara ese aspecto.
La declaración de la madre
Manso, también dio a conocer
aspectos de la declaración de Sabrina Juárez.
“Ella lo que alega es que dio
a luz y que el bebé cayó a la letrina, y que ella entendió que estaba
fallecida, y no lloró” explicó el Fiscal.
“Dice que tuvo un parto
“cascada” y lo que la Fiscalía va a tratar de acreditar es si la niña respiró o
no, a través del estudio anatomopatológico que llegará desde La Plata”.
Con respecto al corte del
cordón umbilical, la madre declaró que “se habría cortado solo por efecto de la
gravedad”. Además, “no pudo explicar” por qué no dio aviso de lo sucedido
durante los días siguientes, hasta que su propia hermana formuló la denuncia el
sentir el olor nauseabundo que provenía del baño.
Sobre las pericias realizadas,
Manso explicó que “personal de Policía Científica roció la dependencia con
“luminol” para detectar la presencia de sangre y acreditar en qué lugar de la
casa se habría producido el parto”. Los resultados, indicó, “no fueron
concluyentes, pero se determinó la existencia de sangre en una habitación y en
el baño”.
Entre los elementos
secuestrados, se encuentran una sábana y un colchón con muestras hemáticas. “Si
los hechos se dieron como dice la imputada, ella se acostó después de dar a
luz, lo que explicaría esas manchas” dijo Manso.
Uno de los detalles más
escabrosos de la investigación surgió cuando se advirtió que el paso del pozo
ciego era demasiado estrecho. “No se pudo demostrar. El paso es estrecho,
justo, pero como la criatura estaba en estado avanzado de descomposición no se
pudo demostrar la existencia de raspones o alguna otra muestra de fricción”.