La adhesión de los empleados del cementerio municipal al paro que se extenderá, al menos, hasta el viernes, impide que se concreten con normalidad los servicios de sepelio.
Así lo hicieron saber familiares de personas cuyos restos debían ser inhumados esta mañana. Por la emergencia, quedaron en depósito en las casas de sepelios.
Juan Martínez, encargado de la necrópolis, confirmó que todo seguirá en las mismas condiciones al menos hasta que la asamblea del viernes decida la continuidad o el cese de las medidas de fuerza.
Los trabajadores del cementerio reclamaron en numerosas oportunidades por las pésimas condiciones de seguridad e higiene en las que desarrollan su tarea. Al mismo tiempo, se sumaron a los reclamos porque no se pagaron aún los sueldos de marzo.