El Secretario de Gobierno, Raúl Cheyllada, fue otro de los oradores durante la conferencia de prensa que se realizó esta mañana para explicar los alcances de la emergencia administrativa.
Tras aclarar que el decreto no es de emergencia económica “porque no afecta los presupuestos”, explicó que apunta a una “cobertura funcional”.
“No hay potestad para arbitrariamente disponer recursos” puntualizó.
Consultado por los recortes que se aplicarán en lo inmediato, explicó que estarán ligados “fundamentalmente a casos de contratos de compra, contrataciones de bienes o servicios”.
El alcance de la disminución en el monto de las bonificaciones (previsto en un 20 %) es “apenas una primera medida de racionalización” agregó, considerando, además, que “es un porcentaje conveniente para la planta política”.
“Queremos generar una mayor eficiencia municipal para la modernización del Estado y resolver lo coyuntural” precisó el funcionario.
Cheyllada agregó, en otro orden, que “las afectaciones tienen que ver con el análisis de las horas extras y las asignaciones, no solo del cumplimiento sino también que no sean todo lo efectivas, y del nivel de impacto, así que se ha generado un cupo que la secretaría de gobierno ha dispuesto para todas las áreas”.
El titular de la Secretaría política explicó, a la hora de evaluar los tiempos que demandaron estos cambios, que “la dinámica del Municipio no es tan sencilla para pasar de todo a nada, o de todo a situaciones que necesitan readecuaciones”.
Como ejemplo, agregó que “de 18 mil horas extras llegamos a 9 mil, y aspiramos a que esta cifra baje a 4.500 que es el punto de equilibrio adecuado, pero hay algunas áreas que más allá de la necesidad específica, habrá que restringirlas”.