La vecina de una casa abandonada (cuya ubicación no fue informada para preservar a los denunciantes) se presentó ante la Justicia para denunciar que personas a las que no pudo identificar intentaron ingresar a una vivienda deshabitada desde hace 20 años.
Lo particular del caso es que, en lugar de forzar puertas y ventanas, como habitualmente sucede, abrieron un boquete en una de las paredes. Hasta hoy, no habían logrado su cometido.
La Fiscalía inició actuaciones por “daños” e intenta determinar quiénes fueron los responsables y si, como se sospecha, se trató de un intento por usurpar la casa.