Un joven que sufrió el robo de un teléfono celular durante un asalto en la vía pública, recibió una insólita respuesta por parte del policía que le tomó la denuncia en la Comisaría local.
Ademar Marabert, tío de la víctima, contó que su sobrino, un enfermero de 24 años que trabaja en el Hospital de Clínicas de la ciudad de Buenos Aires, fue asaltado el miércoles.
“Llamamos al 101, vino un patrullero y le dijeron que dieran detalles de cómo estaban vestidos. Fuimos a hacer la denuncia, porque el teléfono tenía habilitado el sistema para poder rastrearlo, pero en la Comisaría le dijeron que ni haga la denuncia, que negocie con los chorros, porque nadie se va a mover” relató Marabert a La Radio 92.3.
Para completar un panorama desalentador para la víctima del asalto, la empresa prestataria del servicio de telefonía celular le comunicó que no podían bloquear la línea porque aún no se había acreditado el pago de la primera cuota del equipo, adquirido hace dos semanas.