Los responsables de los puestos que, ilegalmente, estuvieron instalados durante los últimos meses en la costanera, recorrieron hoy el ex Balneario Munipal, junto a funcionarios del Departamento Ejecutivo.
Sobre el terreno, fueron informados de los lugares que ocuparán desde el jueves, comienzo del primer fin de semana largo desde que se instrumentaron las nuevas medidas de regularización de la actividad.
Cada uno de los aproximadamente veinte puesteros tendrá un lugar asignado de acuerdo a su rubro.
Una vez instalados, podrán designar un vendedor ambulante para que, identificado con el número de puesto que le corresponde, pueda vender en el resto del Paseo Público Municipal.
El lugar será recorrido por personal de Bromatología, para que se corrobore el cumplimiento de las normativas vigentes.
Algunos de los puesteros, que ya habían acordado con las autoridades la metodología de trabajo, expresaron, sin embargo, sus dudas.
Las principales estuvieron relacionadas con la potencial caída en el nivel de ventas por estar ubicados en un sector con menor tránsito. En ese punto, los funcionarios recordaron (ya se había señalado en la reunión) que no existe ninguna posibilidad de seguir vendiendo al costado del camino costanero, en condiciones precarias, e infringiendo las normativas vigentes.
El otro punto que deberá ser resuelto es la convivencia de puesteros que comercialicen productos del mismo rubro.