Descubren el fósil de un bagre de 200.000 años de antigüedad

Un equipo del Museo Paleontológico de San Pedro realizó un nuevo hallazgo de gran relevancia en el yacimiento de “Campo Spósito”: el fósil de un bagre de 200.000 años. La pieza, parte del cráneo del pez, fue descubierta durante tareas de muestreo en el Bajo del Tala que realizaban  José Luis Aguilar (Director del Museo Paleontológico de San Pedro), la Dra. Analía Forasiepi (IANIGLA-CONICET) y el Sr. Damián Voglino (el primero en observar el fósil en el terreno),  Este nuevo descubrimiento refuerza la teoría de que la zona fue un río prehistórico, lo que abre nuevas perspectivas para comprender la fauna y el ecosistema de la región durante el Pleistoceno medio. El pequeño hueso, de apenas 2 centímetros, proporciona valiosa información sobre las características del curso de agua y las especies que lo habitaban.

Megaoperativo contra prostitución de menores y reducción a la servidumbre con 7 detenidos

Personal de la Dirección de Investigaciones de Arrecifes, a cargo del Comisario Martín Actis, con el apoyo de efectivos de toda la región, desbarató una red de trata de personas y prostitución de menores. 
Las investigaciones estuvieron a cargo de funcionarios de la UFI 6, cuyo titular es el Dr. Rubén Darío Giagnorio, bajo la carátula de “Facilitación de prostitución de menores, reducción a la servidumbre y asociación ilícita agravada”. 

 Un total de 7 personas (5 hombres y 2 mujeres, todos mayores de edad) fueron detenidos. Los allanamientos tuvieron lugares en Arrecifes (3 de ellos), Chacabuco, Florencio Varela, Capital y la Unidad Penal de Caleta Olivia, provincia de Santa Cruz. 

 Además de las detenciones, la policía secuestró 2 revólveres calibre 38, 1 revolver calibre 32, 1 pistola calibre 635, 5 proyectiles calibre 32 punta hueca, 6 cartuchos calibre 16, 25 cartuchos calibre 12/70, numerosos aparatos de telefonía celular, agendas y otra documentación. 
Durante varios meses, antes de los procedimientos, la policía y la Justicia reunieron pruebas de la captación de jóvenes menores de edad en el interior del país. 

En virtud de su estado de vulnerabilidad social y económica eran engañadas bajo promesas de ofrecimientos de trabajos dignos en comercios de la ciudad de Arrecifes. En realidad, se trataba de locales nocturnos en donde se ejercía la prostitución, y se mantenía cautivas a las jóvenes captadas, que residían en ellos en condiciones deplorables de hacinamiento e insalubridad. 
 Las personas detenidas eran quienes desempañaban los distintos roles dentro de la organización delictiva, tales como captadores, proxenetas, propietarios del local nocturno o wiskeria, encargados o custodios.