Una mujer, su hija y sus dos nietos permanecían esta mañana frente a la vivienda de Colón 1720, luego del desalojo concretado por la policía y ordenado por la Justicia.
Dora, la jefa de familia, se negó a recibir asistencia de la Secretaría de Desarrollo Social, e insistió en que es la legítima dueña de la propiedad. Hace dos meses habían resistido otro intento de desalojo.
El operativo incluyó seis móviles de distintas dependencias policiales y profesionales del Municipio.
“Puede más la plata, puede más el sinvergüenza, puede más el chorro. Es mi casa, me rechazaron lo que presentó el abogado y me trajeron este desalojo” indicó la mujer, en declaraciones a La Radio 92.3.
“Estamos con todas las cosas tiradas. Agarraron un fierro y rompieron la puerta. ¿Qué clase de jueces tenemos, el que defiende al que tiene plata?” agregó, apuntando a una persona a la que acusó de perpetrar una maniobra engañosa para quedarse con la propiedad.
Sobre la negativa a trasladarse a otro lugar con su familia, explicó: “Voy a ver qué hacer. No voy a llevar a mis chiquitos al Instituto. Ellos quieren su casita”.