|
Fotos Sergio Ortega |
En medio de una tensa situación, los jefes policiales son los interlocutores ante los usurpadores, para evitar que los incidentes pasen a mayores.
El Director de Coordinación Departamental llegó a ubicarse entre medio de los grupos de choque y los manifestantes, mientras se desmantelaban algunas de las precarias viviendas.
Si bien algunos de los ocupantes decidieron retirarse, algunos otros iniciaron una quema de neumáticos y otros elementos. Algunos de ellos arrojaron palos.
Uno de ellos detonó una bomba de estruendo y dos familias trajeron perros con los que intentaron atacar a la policía para resistir el desalojo, aunque lo que sucedió fue que se inició una pelea entre los propios animales.
“No hubo posibilidad de negociación, dimos lectura a la orden de desalojo, tratando de encontrar una solución pacífica por 45 minutos. Algunos ocupantes desean retirarse voluntariamente, y lo primario es una ocupación pacífica del predio. Otras familias dieron muchas explicaciones que se le dieron, y esperemos que esto termine de una forma pacífica, porque la orden tiene que cumplirse hoy, si o si” explicó la Dra. Demarco, de la Fiscalía local, está a cargo del operativo.
Uno de los camiones del corralón municipal está preparado en la zona para trasladar los elementos de los usurpadores.