Los jóvenes de 28 y 19 años
baleados ayer en Javier Rivero al 1700 fueron dados de alta luego de ser asistidos en el Hospital.
Ambos presentaron lesiones en miembros inferiores sin compromiso óseo.
De acuerdo al informe policial, uno de ellos tenía un orificio de entrada de un proyectil de arma de fuego sin salida en el pie derecho. Los médicos evaluaron, a través de un examen radiológico, que el plomo presenta una pequeña dimensión, no alcanza ningún órgano vital ni provocó lesión ósea, por lo que no fue necesaria la intervención quirúrgica.
En tanto, el otro herido presentó una lesión similar, pero con un orificio de entrada y salida en pie derecho, sin lesión ósea.
Ambos fueron dados de alta una vez finalizada curación.
Las victimas declararon a la policía que momentos antes del episodio, se encontraban en el predio cercado por alambrado, cuando fueron sorprendidos por disparos de arma de fuego efectuados desde la calle por un hombre que circulaba de acompañante en una motocicleta.
De acuerdo a su testimonio, no detuvieron la marcha y se fugaron del lugar sin llegar a ser reconocidos.
La investigación por “Abuso de armas” está a cargo de la UFI Nº 11.