El bloque de concejales del PJ – Frente para la Victoria, en conjunto con Américo Quintana, presentó un proyecto de Ordenanza para prohibir la venta de anteojos fuera de las ópticas.
“La venta de anteojos de todo tipo, incluyendo protectores, correctores y/o filtrantes se debe realizar en forma exclusiva en los comercios habilitados como ópticas” indica la iniciativa en su artículo 1.
A su vez, expresamente prohíbe “la venta en la vía pública de anteojos y/o , elementos que se interpongan entre el campo visual y el ojo humano” y anticipa que en 30 días los comercios que tengan anteojos a la venta tendrán que retirarlos de la exhibición.
La infracción a la norma será sancionada con una multa que va de 3 a 10 sueldos mínimos municipales y la incautación de toda la mercadería.
Entre los fundamentos del proyecto, los autores señalan “la venta indiscriminada de anteojos que conforme a la legislación deberían ser adquiridos bajo prescripción médica oftalmológica, y expendida únicamente en casas de óptica por profesionales idóneos”.
Además, expresan que “estos lentes comprados en canales de venta ilegales y que en materia de precios son mucho más accesibles que aquellos que se adquieren en ópticas, pueden perjudicar de forma extraordinaria la visión, con afecciones como queratoconjuntivitis, queratitis y cataratas, y otras”.
De acuerdo a lo expresado por profesionales a los concejales “la utilización de lentes pre graduados o de sol que se venden de manera ilegal provoca daños como dolores de cabeza, irritación ocular y trastornos en la visión”.
En el mismo sentido, los concejales recuerdan que “en comercios de nuestra ciudad, se comercializan anteojos de todo tipo, incluyendo correctores, protectores y/o filtrantes, y que la venta de elementos que se interponen con el campo visual deben ser adoptados por profesionales en la materia, según expresamente lo legisla la Ley Nacional N° 17.1]7, atento que la utilización de materiales inadecuados pueden provocar importantes lesiones a los usuarios, principalmente de los niños, cuando sus progenitores los adquieren por su escaso valor, y son usados por juguetes por los menores”.