Descubren el fósil de un bagre de 200.000 años de antigüedad

Un equipo del Museo Paleontológico de San Pedro realizó un nuevo hallazgo de gran relevancia en el yacimiento de “Campo Spósito”: el fósil de un bagre de 200.000 años. La pieza, parte del cráneo del pez, fue descubierta durante tareas de muestreo en el Bajo del Tala que realizaban  José Luis Aguilar (Director del Museo Paleontológico de San Pedro), la Dra. Analía Forasiepi (IANIGLA-CONICET) y el Sr. Damián Voglino (el primero en observar el fósil en el terreno),  Este nuevo descubrimiento refuerza la teoría de que la zona fue un río prehistórico, lo que abre nuevas perspectivas para comprender la fauna y el ecosistema de la región durante el Pleistoceno medio. El pequeño hueso, de apenas 2 centímetros, proporciona valiosa información sobre las características del curso de agua y las especies que lo habitaban.

SENASA explicó el rechazo del maíz embarcado en San Pedro

Gustavo Rolfo, titular del SENASA, dio detalles técnicos sobre el rechazo en Estados Unidos de un cargamento de maíz embarcado en San Pedro. 
Rolfo precisó que “se detectó la presencia de una maleza (Asphodelus fistulosus) que Estados Unidos tenía como peligrosa, y esa carga vuelve a Argentina para ser reimportada, y los exportadores tienen que cumplir con la carga”. 

El funcionario confirmó detalles del procedimiento que se realiza para inspeccionar la carga: “Se cumplió con el requisito sanitario que tiene Estados Unidos para el país exportador. En este caso, no tiene ningún requisito especial, por lo que en el monitoreo que se hace de la carga no se detectó la maleza, y se certificaron las condiciones de exportación. Sin embargo, cuando llegó a Estados Unidos encuentran, supuestamente, esta maleza, y consideran “de rechazo” la mercadería y por eso vuelve a Argentina”. 
Rolfo ratificó que “no hubo ningún inconveniente de mala operación en la exportación” y adelantó que “cuando se vuelve a exportar, si la empresa decide hacerlo, se va a tomar intervención, pero no va a cambiar el método porque el muestreo se hace como lo pide Estados Unidos”. 
El representante de SENASA puso en contexto lo sucedido: “En realidad las operaciones de rechazo en el mundo existen. Lo que hacen los países de destino es notificar internacionalmente el hecho. El SENASA lo recibe como el organismo de control y tiene que hacer un descargo de lo sucedido. Ha pasado en operaciones de contenedores, pero en operaciones de buque es la primera vez que pasa esto”.