Tras la polémica generada por las características del reductor de velocidad instalado en Av. 3 de Febrero y Sandrini, la Municipalidad de San Pedro decidió realizar reformas en el lugar.
Durante el fin de semana se conocieron, a través de los medios de comunicación, testimonios de vecinos que alertaron sobre el riesgo que representaba para los vehículos de todo porte.
El caso más grave fue el de una familia oriunda de Quilmes que salía de San Pedro en la noche del domingo en un utilitario. La parte de abajo del vehículo golpeó con el reductor, lo que produjo la rotura del cárter. El conductor y su hija debieron quedarse en casa de un familiar (la niña no pudo asistir a la escuela) y su esposa viajó en colectivo a su ciudad de origen para no perder el día laboral.
Finalmente, luego de que su caso se hiciera público en "Equipo de Radio", tomó intervención la Defensoría del Pueblo y el arreglo corrió por cuenta del mecánico de la Municipalidad.
Este tipo de situaciones obligaron a la Secretaría de Obras Públicas y la Dirección de Tránsito a corregir el reductor, lo que determina que la Avenida 3 de Febrero vuelva a estar cerrada a la circulación de vehículo.
Las autoridades informaron que dieron “expresas instrucciones a la empresa responsable para que esto se realice a la mayor brevedad posible”.