Trabajadores de la empresa "Saladino", tomaron las instalaciones de la fábrica de bolsas que funciona en proximidades de la localidad de Río Tala.
Luego de la polémica por la presencia de empleados misioneros y venezolanos trabajando en condiciones irregulares y viviendo en estado de hacinamiento, se había alcanzado un principio de acuerdo, en el que también intervino la regional de CGT.
Incluso, el Intendente Cecilio Salazar había visitado la planta para conocer su funcionamiento.
Sin embargo, pocas semanas después, empleados de la firma decidieron iniciar una medida de fuerza por tiempo indeterminado. Entre otros reclamos, sostienen que se les adeuda gran parte de lo trabajado en los últimos tres meses, en los que recibieron solo 7 mil pesos en dos pagos.
Además, sostienen que no se modificó el régimen laboral, con 12 horas diarias, muy por encima de lo establecido legalmente.
Hace 10 días, se conoció el cronograma de pago de indemnizaciones a los cesanteados, en cuotas de 300 pesos.