La Sociedad Rural de San Pedro emitió un nuevo comunicado en relación a la investigación por presuntos hechos de corrupción en los gobiernos de Néstor y Cristina Fernández de Kirchner.
La entidad que preside Raúl Victores apunta contra "los que se han ido, pero no del todo, y cantan que van a volver". También sostienen que "el precipicio en el que esperamos que caigan de una vez está cada vez más cerca...".
Esta es la nota completa, titulada "Cueva de buitres":
"Los argentinos tenemos claro que la capacidad de asombro se acrecienta con el transcurrir del tiempo. Pasan los años, los escándalos nos golpean en la cara y cuando creemos que nada podrá superar lo visto u oído, aparecen desde modestos cuadernitos escolares, golpes durísimos que nos dejan al borde del jaque mate como sociedad.
La reacción popular por suerte vuelve a mostrar que los dirigentes no pueden ocultar semejantes niveles de vergüenza. La corrupción enquistada en nuestra sociedad se personifica en registros increíbles de movimientos de dinero que hasta en un guión cinematográfico resultarían inverosímiles.
Las cadenas de coimas, la corrupción transversal y la defensa religiosa de verdades que aplastan nos conmueven. Nuestros representantes demoraron por temor, impericia o complicidad, un mecanismo judicial que pierde su efecto e instala una sensación de complicidad que no se elimina con discursos floridos.
Los que se han ido, pero no del todo, y cantan que van a volver, convirtieron a la administración pública en un cártel que utilizó el dinero recaudado con nuestros impuestos para generar una riqueza mugrosa e injusta que deriva en pobreza para muchos sectores de la sociedad.
Queda claro que no nos equivocamos cuando allá por el 2005 en un texto similar nos animamos a definirlos como "una banda de ladrones".
Hoy el precipicio en el que esperamos que caigan de una vez está más cerca, pero para definitivamente salir de estas cíclicas afrentas a todos los argentinos, necesitamos que se desinfecte también la "cueva de buitres" que lucha por defenderlos, para salvarlos y salvarse.
Demoraremos años en recuperarnos de estos bandidos de saco y corbata rodeados de asesores que vivieron una vida irreal con nuestro dinero. Y a esta altura nos preguntamos, ¿Donde están los empresarios y las entidades prevendarias que se rompían las manos aplaudiendo las diarias cadenas de adoctrinamiento nacional a las que nos sometían?
Gobernadores coleccionistas de sobres, periodistas que no lo eran y sólo competían por decir el elogio mas empalagoso del día, y la contracara de un país con millones de argentinos sin agua, sin cloacas, pero con una pantalla de televisión que los trataba de convencer de jamás habían estado o podrían estar mejor.
Funcionarios, políticos, dirigentes, jueces, periodistas, profesionales y demás son parte de una sociedad que no puede mirar para el costado y que parece querer reaccionar de una vez.
Ojala no nos quedemos en la catarsis y tengamos la adultez como para que aunque el camino sea muy largo, comencemos a recorrerlo hacia un país en el que la trampa, la viveza y el aprovecharse de los demás sea considerado un valor y en el que quienes así lo hicieron realmente sufran haber jurado...que Dios y la Patria me lo demanden".