Descubren el fósil de un bagre de 200.000 años de antigüedad

Un equipo del Museo Paleontológico de San Pedro realizó un nuevo hallazgo de gran relevancia en el yacimiento de “Campo Spósito”: el fósil de un bagre de 200.000 años. La pieza, parte del cráneo del pez, fue descubierta durante tareas de muestreo en el Bajo del Tala que realizaban  José Luis Aguilar (Director del Museo Paleontológico de San Pedro), la Dra. Analía Forasiepi (IANIGLA-CONICET) y el Sr. Damián Voglino (el primero en observar el fósil en el terreno),  Este nuevo descubrimiento refuerza la teoría de que la zona fue un río prehistórico, lo que abre nuevas perspectivas para comprender la fauna y el ecosistema de la región durante el Pleistoceno medio. El pequeño hueso, de apenas 2 centímetros, proporciona valiosa información sobre las características del curso de agua y las especies que lo habitaban.

Proyectan un vivero municipal de especies autóctonas

Un proyecto presentado por el ex Director de Cultura, José Luis Aguilar, propone crear, en los galpones existentes en el predio del ex balneario municipal y su fracción de terreno circundante, un sector donde se puedan reproducir, envasar y distribuir diferentes especies vegetales autóctonas.
Actualmente, esos galpones están ocupados con herramientas y útiles del sector de Plazas y Jardines, por lo que ya sería un paso dado al estar, las herramientas necesarias, ya presentes en ese lugar.

Alrededor de dichos galpones, que continuarían oficiando de espacio para utensilios varios y envases apropiados, se delimitarían una serie de pequeñas cuadrículas (tantas como especies se quieran reproducir) de unos 4 m de largo X 2 m de ancho, donde se realizarían los almácigos de crecimiento de los plantines.
Luego de un año o dos, de acuerdo a la especie, esos plantines estarían aptos para ser trasplantados a envases de plástico de medida apropiada donde quedarían listos para su distribución.
Una vez dispuestos en los envases correspondientes, las nuevas plantas autóctonas estarían listas para salir del vivero hacia las casas de turistas o sampedrinos.
En el caso de los sampedrinos, éstos podrían acercarse al VIMEA solicitando por nota las especies que desean y la cantidad necesaria, para ser utilizadas en la reforestación de veredas o jardines con plantas autóctonas, sin costo alguno.
El acopio de notas de sampedrinos solicitando plantines permitiría llevar un registro de las especies más requeridas para, así, fortalecer su reproducción y permitiría evaluar la aceptación y utilidad del vivero municipal.
En el caso de los turistas o visitantes, la adquisición de platines producidos por el VIMEA tendría un costo a ser fijado por el Municipio que permitiría el mantenimiento del lugar en buenas condiciones y la compra de envases y productos necesarios para la reproducción de las plantas. Es decir, el desenvolvimiento del vivero.
Además, los autores sugirieron que, al momento de su distribución, cada planta sea entregada con una ficha en la que se especifiquen nombre común y nombre científico de cada especie, características generales (altura, época de floración, etc.) y sugerencias básicas de cuidados.
Los trabajos de reproducción y mantenimiento general de las plantas, así como su entrega al público solicitante, se harían con personal de Plazas y Jardines que desee participar de la idea y quien, previamente, se le brinde una mínima capacitación en el tema autóctonas por parte de referentes en biodiversidad de nuestra ciudad.