Descubren el fósil de un bagre de 200.000 años de antigüedad

Un equipo del Museo Paleontológico de San Pedro realizó un nuevo hallazgo de gran relevancia en el yacimiento de “Campo Spósito”: el fósil de un bagre de 200.000 años. La pieza, parte del cráneo del pez, fue descubierta durante tareas de muestreo en el Bajo del Tala que realizaban  José Luis Aguilar (Director del Museo Paleontológico de San Pedro), la Dra. Analía Forasiepi (IANIGLA-CONICET) y el Sr. Damián Voglino (el primero en observar el fósil en el terreno),  Este nuevo descubrimiento refuerza la teoría de que la zona fue un río prehistórico, lo que abre nuevas perspectivas para comprender la fauna y el ecosistema de la región durante el Pleistoceno medio. El pequeño hueso, de apenas 2 centímetros, proporciona valiosa información sobre las características del curso de agua y las especies que lo habitaban.

"Me veo obligada a largar los perros del refugio a la calle"

Cecilia Tarsetti, responsable del Refugio San Pedro, confirmó lo adelantado en un posteo realizado en las redes sociales: por razones económicas, parte de los animales volverán a la calle.
"Lamentablemente, y por causas de fuerza mayor, me veo obligada a largar los perros del refugio a la calle. Castrados y con su vacuna... eso si" aclaró la proteccionista.

Tarsetti trabaja hoy en el Departamento Canino del Municipio, en una oficina contigua al refugio. Sin embargo, todo su sueldo fue destinado, como en meses anteriores, al mantenimiento del lugar. "No hay presupuesto para solventar tanto gasto. Yo puse mi mísero aguinaldo y mi pobre sueldo pero nada alcanza" explicó.
En la misma publicación, agregó: "Si ven nuevos perritos en las calles, seguro son los refugiados que recuperaron su libertad. Me quedo con los viejos, ciegos y cachorros enfermos". Además, pidió que quienes los vean por las calles, les ofrezcan agua y algo para comer.
En una entrevista que será publicada en "Somos Noticias" precisó que "no es vida para los animales que estén encerrados en un canil de 4x4 con calor, que se inundan cuando llueven, y eso me pone mal, y me estresa y me angustia..."
El primero de los alrededor de 60 animales que están ante la disyuntiva de encontrar un nuevo hogar o ir a la calle ya fue entregado a su antigua tenedora. Al menos otros 100 perros seguirán en el refugio. Aún con esa reducción, nadie puede asegurar de dónde saldrá el dinero para pagar los sueldos de las dos personas que ayudan a Tarsetti con la limpieza y la alimentación, las atenciones de los veterinarios, el alimento y los insumos para la mantención.