La Sociedad Rural de San Pedro expresó su "rechazo y preocupación" ante la iniciativa publicada en medios nacionales, "anticipando las intenciones del gobierno nacional de asociarse con China para su intervención en el mercado porcino".
Para la entidad que preside Edgardo Salmoiraghi "es sin dudas otra provocación para los productores argentinos que confirma la creatividad con la que este subgobierno puede poner a prueba nuestra capacidad de asombro".
La noticia aparece publicada en algunos medios "con números y detalles que para quienes no están en la actividad hasta podrían parecer atractivos" señalan. "Pero estamos una vez más ante otra maniobra que apunta fuerte y al centro de uno de los sectores productivos más importantes de las economías regionales del país" consideran.
La Rural de San Pedro estima "incomprensible que mientras el país ocupa la cama principal de la Terapia Intensiva y con un respirador que casi ya no funciona, distraigan esfuerzos en acciones que lejos de generar beneficios para quienes siguen apuntalando la economía nacional, los llenan de dudas e incertidumbre".
Los productores argentinos, afirma la institución, "seguimos demostrando, aún en plena Pandemia, que somos quienes podemos mantener la eficiencia y la continuidad, sin necesidad de estas dudosas asociaciones".
En sus últimos párrafos, el comunicado vuelve a cargar contra las decisiones del gobierno nacional:
"Para producir más y exportar más, sólo necesitamos que se generen condiciones de confianza e igualdad, alternativas crediticias y todo aquello que en el resto del mundo, respalda a quien trabaja y genera trabajo.
La animosidad y subestimación de la calidad de nuestros productores es evidente y el desconocimiento del sector por parte de quienes forman parte del gobierno, es alarmante.
Ya lo demostraron con Vicentín y con otras acciones que a poco de ser presentadas para que la hinchada aplauda, van quedando en el camino por todas sus falencias y arbitrariedades.
Los productores argentinos merecemos respeto y que se nos deje trabajar en condiciones igualitarias con el resto del mundo.
Rechazamos este intento de «colonización china» que aunque no es difícil de suponer, viniendo de este tipo de gobierno, sigue alimentando la maquinaria de peajes políticos sin que les importe dinamitar económica y sanitariamente nuestra producción".