Los dos jóvenes detenidos como acusados de asesinar de un balazo en la cabeza a un camionero en la localidad bonaerense de Río Tala, partido de San Pedro, se declararon inocentes al declarar ante la fiscal de la causa y continuarán presos, informaron fuentes judiciales.
Se trata de dos sospechosos de 19 y 23 años quienes fueron indagados el sábado por la fiscal María del Valle Viviani, titular de la UFI 7, a cargo de la investigación.
Asistidos por un defensor oficial, ambos se declararon inocentes y negaron su participación en el hecho en el cual fue asesinado Néstor David Insaurralde (26) de un balazo en la cabeza.
En tanto, Viviani solicitó convertir en detención la aprehensión de los sospechosos -que ya fue convalidada por el juzgado de garantías interviniente-, a quienes les imputó los delitos de "homicidio en ocasión de robo en concurso ideal con robo agravado por el uso de arma de fuego, portación ilegal de arma de fuego y tenencia ilegal de arma de guerra".
Por su parte, durante la autopsia practicada al cuerpo de la víctima, los forenses extrajeron un proyectil calibre .28 que será cotejado con una escopeta recortada secuestrada durante los allanamientos realizados, para poder determinar si el disparo fue efectuado con esa arma de fuego.
Asimismo, se aguarda el resultado del estudio de dermotest realizado a los detenidos, como así también del levantamiento de huellas en el camión que conducía la víctima.
Insaurralde fue encontrado ayer con un balazo a la altura de la sien cerca de las 6 de en el asiento del conductor de un camión de carga Fiat Iveco en el que llevaba un cargamento de almohadas y que estaba en el cantero central de la ruta 9, a la altura del kilómetro 154, con sentido a Rosario.
El conductor había salido del Cuartel V, partido de Moreno, y se dirigía con la carga hacia la provincia de Córdoba.
La principal hipótesis del hecho apunta a que el camionero fue asaltado cuando estaba detenido en ese sitio (por motivos que se desconocen) y que lo balearon cuando intentó acelerar para escapar.
Los delincuentes solo llegaron a robar ocho almohadas que formaban parte del cargamento.
Por orden judicial, la policía analizó las cámaras de seguridad de la autovía y de una estación de servicios Shell ubicada al frente del lugar de donde estaba el camión.
Durante los allanamientos en los cuales fueron detenidos los dos sospechosos, también se secuestró un revólver calibre .32 largo, 30 teléfonos celulares y prendas de vestir con manchas de sangre que serán peritadas en las próximas horas.