El río Paraná volvió a bajar por tercer mes consecutivo, situación que complica la logística de transporte por la Hidrovía Paraná-Paraguay.
El último informe del Instituto Nacional del Agua, que se conoció este domingo, expresa que "el caudal entrante al Delta se estima en el orden de 9.800 m3/s, en leve disminución, muy por debajo de lo normal y no se espera una recuperación sensible en las próximas dos semanas, por lo menos".
Los valores actuales están muy por debajo del promedio histórico para mayo. Esta mañana, San Pedro registraba apenas 18 centímetros, con una caída de 32 centímetros con respecto al día anterior. La perspectiva es negativa, considerando que todo el tramo alto y medio del Paraná sigue bajando.
La Bolsa de Cereales de Entre Ríos alertó que el escenario "es grave" e "igual o peor que el año pasado", cuando el río Paraná mantuvo niveles muy por debajo del de aguas bajas y cerca de la altura de menor caudal de la historia.
"La perspectiva que se agudice la bajante del río en las próximas semanas comienza a despertar el temor que se resienta el embarque de maíz tardío o de segunda, el grueso de cuyas descargas se realiza entre los meses de julio y agosto", advirtió por su parte la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
Bajante histórica
Desde el Centro de Ecología Aplicada del Litoral afirman que la bajante del río Paraná es histórica: lleva casi 700 días.
El periodo de la bajante del río inició en junio del 2019, es decir, lleva casi 700 días, según Juan José Neiff, investigador principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet) en el Centro de Ecología Aplicada del Litoral. La extensión en el tiempo es lo extraordinario de esta gran bajante, que se relaciona directamente con la sequía.
En este sentido, explicó que durante el siglo pasado se registraron sequías de hasta 250 días, por lo que ésta se trataría de una sequía histórica desde 1900, fecha desde la que se tiene datos del río.
Además, en el siglo pasado las bajantes pronunciadas se presentaban cada dos o tres años hasta 1978. Desde 1978 hasta la bajante que se transita actualmente no se había registrado otra.
En este contexto, el investigador indicó que no es posible prever la frecuencia de las bajantes con exactitud porque el período de mediciones es muy irregular.
Asimismo, se refirió al fenómeno climático de La Niña, y adelantó que el periodo de sequía se extendería hasta la primavera o verano.
Con información de Telam, Prefectura Naval y AIMDigital