Como es habitual en el inicio de los fines de semana, se realizó en la madrugada del sábado un operativo de interceptación vehicular en la zona céntrica de la ciudad.
En esta oportunidad, el dispositivo estuvo ubicado en Pellegrini y Obligado, desde las 3 de la madrugada.
Personal policial e inspectores de la Dirección de Tránsito municipal secuestraron dos automóviles y una motocicleta. En todos los casos, sus conductores dieron positivo al test de alcoholemia.
Tras labrarse las actuaciones correspondientes por infracción a la Ley de Tránsito (24449), tomó intervención el Juzgado de Faltas local.