Los registros de la última semana en el río Paraná volvieron a generar preocupación, ante la perspectiva de que continúe la bajante al menos hasta fin de año.
En San Pedro, la altura de las aguas en el hidrómetro del puerto local se mantenía en 30 centímetros, es decir 1 metro y 12 centímetros por debajo de su referencia histórica. El promedio esperado para septiembre (52 centímetros), octubre (67) y noviembre (74) siguen siendo dramáticamente bajo.
El Paraná se mantiene muy por debajo de sus niveles normales y de los límites de aguas bajas desde principios del 2020, y el Instituto Nacional del Agua (INA) aseguró que esa situación permanecerá al menos hasta el último bimestre del 2022.
La bajante histórica tuvo su inicio en marzo del 2020, un año más tarde recuperó una tendencia alcista sin alcanzar su normalidad, volvió a caer a fines del 2021, y provocó notorios cambios en la vida ambiental, económica, productiva y social entrerriana.
De características extraordinarias por su "magnitud y persistencia", la bajante fue calificada como el estiaje "más largo de la historia" (desde 1884) y "seguirá siendo motivo de especial monitoreo" advirtió el INA.