Descubren el fósil de un bagre de 200.000 años de antigüedad

Un equipo del Museo Paleontológico de San Pedro realizó un nuevo hallazgo de gran relevancia en el yacimiento de “Campo Spósito”: el fósil de un bagre de 200.000 años. La pieza, parte del cráneo del pez, fue descubierta durante tareas de muestreo en el Bajo del Tala que realizaban  José Luis Aguilar (Director del Museo Paleontológico de San Pedro), la Dra. Analía Forasiepi (IANIGLA-CONICET) y el Sr. Damián Voglino (el primero en observar el fósil en el terreno),  Este nuevo descubrimiento refuerza la teoría de que la zona fue un río prehistórico, lo que abre nuevas perspectivas para comprender la fauna y el ecosistema de la región durante el Pleistoceno medio. El pequeño hueso, de apenas 2 centímetros, proporciona valiosa información sobre las características del curso de agua y las especies que lo habitaban.

Recuperan el plano de una bodega sampedrina que funcionó hace casi un siglo


La familia Scandiani se encuentra restaurando el antiguo almacén “La Susana”, viejo edificio de campo ubicado en el denominado Paraje Basso. En las próximas semanas, volverá a cobrar vida y comenzará a funcionar como un nuevo punto gastronómico, camino a Vuelta de Obligado.

En ese contexto y en la búsqueda de documentación, imágenes y demás objetos que permitan contar la historia de un lugar emblemático del San Pedro de la primera mitad del siglo XX, dieron con el antiguo plano de la bodega “La Ribera”.



El ajado plano de 1928, muestra la distribución de la primera bodega establecida por la familia en nuestra zona.

La estancia donde funcionó era propiedad de María Obligado y Francisco Soto y Calvo, mientras que la finca se llamaba “La Viña”, una fracción de tierra alquilada por Don José Scandiani. Allí, Luis Scandiani, uno de sus hijos, junto a su esposa, María Dentone, armó la bodega “La Ribera”.

El lugar tenía una llamativa construcción de la que sobresalía un altillo en forma de pequeña torre, que resistió el embate del tiempo hasta que fue lamentablemente demolida hace apenas unos años. Cualquiera que haya recorrido el camino de tierra que une Obligado con Paraíso, tal vez recuerde aquella torre en cuyo frente se leía “La Viña”, en letras en relieve.