Una mujer de 45 años denunció en la Comisaría local que el pasado 16 de mayo le hackearon su cuenta de Instagram. La página en esa red social era utilizada para la venta de productos de blanquería.
Durante varios días recibió mensajes a su WhatsApp desde un número de teléfono que desconocía, expresándole que su cuenta había sido robada por un hacker. Además, en las mismas comunicaciones, ofrecían sus servicios para desbloquearle el perfil y restituirle su cuenta.
La víctima del hecho eligió no contestar los menajes por temor a una estafa o a una intervención en su propio teléfono.
La causa se instruye en la Unidad Fiscal de Instrucción 7, a cargo de la Dra. María del Valle Viviani.