El último tramo de las elecciones aumenta la expectativa para los candidatos de los distintos espacios políticos.
Después de que en las primeras horas el porcentaje de votantes estuviera por debajo de lo habitual, el pico de afluencia se registró entre las 11 y las 13, en la mayoría de las mesas.
La mayoría de los dirigentes mira con atención el porcentaje final de votantes, en función de dos variables: la cantidad de personas que van por fuera de la estructuras partidarias y la cifra repartidora que marcará el piso para ingresar al Concejo Deliberante.
En las últimas elecciones generales de 2019, votó el 84,88% del padrón, mientras que en 2015 asistió el 82,22, en 2011 el 82,75 y en 2007 el 79,59. El porcentaje habitualmente baja entre tres y cinco puntos para las legislativas y más aún en las PASO.
De mantenerse el promedio superior al 80% del padrón de los últimos cuatro comicios, votarían entre 44.000 y 45.000 ciudadanos, elevando el número mínimo para ingresar al HCD a cerca de 5.000 votos. Los números, claramente, se modifican en proporción al aumento o disminución de la asistencia a las urnas en las próximas dos horas.