INTA San Pedro dio por concluída una nueva edición del servicio de alarmas para el control de heladas, con cinco noches de acompañamiento y dos jornadas con temperaturas bajo cero.
El informe final indicó que las horas y unidades de frío requeridas fueron menores a las cifras históricas.
El 13 de agosto la temperatura se mantuvo por debajo de 0 ºC durante un período de 1:40 hs, alcanzando su punto mínimo de -0,9 ºC a las 2:30. El 26 de agosto, la temperatura se mantuvo en valores inferiores a 0 ºC durante un período de media hora, llegando a un mínimo de -0,4 ºC a las 04:50 hs.
En un contexto más amplio, entre el 1 de mayo y el 31 de agosto se registraron un total de 485 horas de frío y una acumulación de 538 unidades de frío, mientras que la acumulación promedio para el período comprendido entre 1965 y 2022 asciende a 586 horas y 801 unidades de frío, respectivamente. Estos datos nos proporcionan un contexto valioso para evaluar las condiciones climáticas y su impacto en el comportamiento de los frutales.
Estado de los frutales
"En la actualidad se observa un comportamiento adecuado para las variedades que se cosechan hacia comienzos de la temporada. Los cultivares que maduran durante el mes de noviembre muestran una carga adecuada y está siendo correctamente acompañada por el desarrollo vegetativo" remarcaron los profesionales del instituto.
"A partir de las variedades que maduran hacia finales de noviembre/principios de diciembre se visualizan floraciones demoradas y que se están prolongando en el tiempo, con demora en la brotación. Hay variedades que muestran de manera evidente el perjuicio de la insuficiente acumulación de frío. Hay frutos cuajados conviviendo con flores recién abiertas o flores con caída de pétalos, todo en la misma planta" explicaron. "Incluso hay desuniformidad entre plantas de la misma variedad. Si bien es temprano para ser categórico, este comportamiento puede implicar dificultades en la toma de decisiones por parte del productor (raleo de frutos - momento/intensidad). Estos factores actuando en conjunto generan posibilidades de afectar calibre y rendimiento" precisaron.
El informe concluye señalando que "es previsible que las variedades que maduran desde mediados de enero en adelante, aún cuando hayan sufrido en mayor o menor medida una insuficiente acumulación de frío, sean capaces de producir de manera relativamente adecuada ya que un período de desarrollo de fruto (días entre plena floración y cosecha) prolongado permite que lleguen a madurez en mejores condiciones".