El descubrimiento forma parte de una investigación más amplia que incluyó 13 allanamientos simultáneos en Rosario, Pérez y Santa Fe, entre ellos una cueva financiera en el centro de Rosario. Como resultado, fueron detenidas cuatro personas, quienes enfrentarán indagatorias este jueves en los tribunales federales.
La investigación, dirigida por los fiscales coadyuvantes Santiago Alberdi y Matías Mené del área de Investigación y Litigios de Casos Complejos de la Unidad Fiscal de Rosario, junto al juez federal Marcelo Bailaque del Juzgado N° 4, se originó como resultado de un procedimiento previo ocurrido en diciembre pasado. En aquella ocasión, en Alsina y Ocampo, zona oeste de la ciudad, fueron aprehendidos dos pasajeros de un taxi con 10 panes de cocaína, lo que desencadenó el desarrollo de esta investigación más amplia sobre el tráfico de estupefacientes.
Según los investigadores, la banda utilizaba un taxi con licencia en Rosario como vehículo campana para acompañar a otro automóvil que transportaba los ladrillos de cocaína.
Los principales integrantes de la banda, según las investigaciones, son Ayelén A., y los hermanos Misael y Fernando R. Fernando, de 30 años y oriundo de Pérez, está registrado como empleado en blanco de una mujer dedicada al negocio de los taxis en Rosario. Por su parte, Misael, de 31 años, también trabaja para la misma mujer. Ambos fueron detenidos el domingo pasado cuando viajaban en el Fiat Cronos y el Peugeot 308 interceptados en la ruta nacional 9 cerca de San Pedro.
Ayelén, de 30 años y ex empleada gastronómica, también está registrada en el rubro de taxis según los datos de la AFIP. Fue arrestada el lunes en el barrio de Arroyito, Rosario.
Durante el avance de las medidas de investigación, los sospechosos fueron identificados moviendo la droga dentro de Rosario utilizando remises no registrados, taxis y vehículos particulares. En ciertas ocasiones, almacenaban la cocaína en departamentos de alquiler temporario ubicados en el centro y macrocentro de la ciudad.
Además, se descubrió que los implicados llevaban el dinero obtenido por la venta de drogas a una cueva financiera situada frente a uno de los hoteles más reconocidos de Rosario, en Mitre y Catamarca, en pleno corazón del centro urbano. El propósito evidente era cambiar estos fondos por dólares blue para luego utilizar la moneda estadounidense en la adquisición de la cocaína que comercializaban.
La cueva financiera fue uno de los lugares allanados el lunes por la Policía Federal, resultando en la identificación de dos individuos. Durante el operativo, se confiscó un teléfono móvil que podría aportar información crucial a la investigación dirigida por los fiscales Alberdi y Mené.
