Tras una exhaustiva investigación, que incluyó el análisis de cámaras de seguridad y la toma de declaraciones, se determinó que un joven de 23 años, residente del domicilio donde se produjo el hecho, habría efectuado el disparo que causó la muerte de Belo. Según las primeras informaciones, la víctima había concurrido al lugar junto a su hermano y otra persona, por motivos aún por determinar.
El martes pasado, el Juzgado de Garantías 1 emitió una orden de detención para el imputado y un allanamiento en una posible nueva residencia, dado que el joven y su familia se habían mudado tras el hecho. Durante el allanamiento, se secuestraron municiones tipo cartuchos de escopeta, pero no se hallaron armas de fuego.
El imputado se presentó de manera voluntaria en la sede del Grupo Operativo de la Sub DDI Baradero y fue trasladado a la fiscalía para prestar declaración.
