El bloque de la Unión Cívica Radical en el Concejo Deliberante presentó un proyecto de ordenanza que busca restringir el ingreso a la planta permanente del personal municipal para aquellos que hayan ocupado cargos políticos en los últimos doce meses.
La iniciativa, según explicaron los concejales radicales, tiene como objetivo garantizar que el acceso al empleo público se base en el mérito y no en vínculos políticos.
"Quienes son designados para ocupar cargos políticos, concurren a realizar la tarea encomendada por una decisión individual e inconsulta del gobernante de turno, siendo razonable que ello ocurra, debido a quien ha sido electo para conducir los destinos de una ciudad, debe tener la facultad de poder elegir libremente a quienes contribuirán a llevar adelante las políticas públicas que proyecta para esa ciudad" recuerdan los autores. "No obstante ello, se han advertido en todos los tiempos, casos de personal que integra la planta política, que inmediatamente antes, después o durante el ejercicio de tal función, pasan a formar parte de la planta permanente o, en su caso temporaria, por escasos das a veces horas, para luego pedir licencia" expresan luego.
La iniciativa lleva la firma de Yanina Batalla, Lucas Pisani, Hugo Binimellis y Paola Basso.
"Resulta a todas luces un artilugio para establecer dentro de la planta de personal, a personas que responden al color político de que se trate, aumentando a lo largo de los años, la ya muy frondosa planta de personal" opinaron. En el mismo sentido, agregaron: "A su vez, esas personas no son convocadas por su expertise en la materia del área a la que son asignados 'provisoriamente" dentro de la planta permanente o temporaria. No solo son innumerables los ingresos a la planta de personal en las condiciones citadas, sino que también se advierte que esos ingresos tampoco son en la categoría correspondiente al grado inferior de la clase inicial que corresponde a cada agrupamiento, sin existir justificativo alguno al respecto".
Entre los considerandos, los concejales agregan: "En consecuencia, resulta a todas luces de una justicia singular que quien ocupa un cargo político o de poder, al terminar su mandato se vaya a su casa, sin que puedo ampararse en la estabilidad que otorga el régimen de empleo público, únicamente reservado para el personal que ingreso no por su ideología sino por sus cualidades personales a ejercer un cargo público".
El proyecto de ordenanza establece un período de carencia de un año para que los exfuncionarios políticos puedan acceder a la planta permanente, con el fin de evitar posibles conflictos de intereses y garantizar una mayor transparencia en los procesos de selección.