Fiscalía y acusación pidieron 25 años de prisión para el docente condenado por abuso

La Fiscala Viviana Ramos y el abogado de las víctimas, Fernando Nouet, pidieron 25 años de prisión para Nicolás Pérez, el docente que fue condenado por un jurado popular por ser hallado culpable de abusos contra cuatro alumnas de la Escuela Agraria.  La presentación fue realizada en la audiencia de cesura que tuvo lugar este miércoles en San Nicolás, como paso previo a que el tribunal resuelva sobre el monto de la pena. 

Una paciente internada con hemorragias se negó a que le realicen una transfusión de sangre

Un caso que demandó la intervención de la Justicia y una interconsulta entre médicos y abogados se generó en el Hospital luego de que una mujer que presenta una patología que le genera hemorragias se negó a que le realicen una transfusión de sangre.
El Dr. Pablo Pichioni, Director del Hospital Subzonal “Dr. Emilio Ruffa” informó que “se trata de una mujer de 50 años que tiene una patología que le genera un sangrado y por ende una de las indicaciones hubiera sido transfundirla”.

De todos modos, aclaró que “en este caso, por un tema religioso que como médicos tenemos que saber comprender, se toman medidas no curativas sino paliativas”.
El procedimiento, indicó Pichioni, “está estandarizado, aunque genera médica y jurídicamente un proceso mucho más difícil de llevar, porque se hace más difícil trabajar con el paciente”.
Luego de la interconsulta con el sector de hematología, se aplicaron medicamentos que permitieron estabilizar la condición de la paciente. “Hematología trabaja este tema porque es para ellos mucho más común toparse con pacientes con esta creencia. Por otro lado se tomó la decisión por parte del equipo médico de ver la posibilidad de trasladarla a un centro de mayor complejidad en caso de llevar adelante acciones que nosotros no podemos hacer” indicó el profesional.
Pichioni defendió, de todos modos, el derecho del paciente de ejercer los preceptos de su religión: “Uno como médico tiene que hacer todo lo posible por salvar al paciente pero sin corromperlo. Está en todos sus actos conciente, y queda constatado en la historia clínica, incluso con el asesoramiento de la abogada que tenemos en el Hospital. El que decide en este caso es el paciente que está en sus cabales y en su derecho”.