Marisel “Pili” Solís, de 47 años, fue detenida este martes en el marco de la investigación por la muerte de Marcel González, el joven uruguayo encontrado sin vida en un campo de la ruta 191. Solís, quien era pareja de la víctima, es la principal sospechosa del homicidio.
La orden de detención fue librada por el juez de Garantías Ricardo Prati, tras el rechazo de la Cámara de Apelaciones a un pedido de eximición de prisión presentado por la defensa de Solís. La mujer, quien es la única propietaria del establecimiento donde ocurrió el hecho, había sido detenida brevemente al momento de denunciar el hallazgo del cuerpo, pero luego había recuperado la libertad.
La principal hipótesis de los investigadores es que Solís asesinó a su pareja, aunque la mujer había declarado que ambos habían consumido hongos alucinógenos y que no recordaba lo sucedido. Sin embargo, una pericia realizada por un perito de parte de la familia de la víctima determinó que las lesiones que presentaba el cuerpo eran incompatibles con un suicidio.
La calificación legal del delito es “homicidio calificado por el vínculo”, lo que implica una pena de prisión perpetua en caso de ser encontrada culpable. La defensa de Solís buscará que la mujer cumpla la prisión preventiva en su domicilio, argumentando que es la única cuidadora de su hija menor de edad.
La familia de la víctima había insistido en plantear irregularidades en la investigación, a cargo de la Dra. María del Valle Viviani. Su hermana Mikaela llegó la semana pasada desde Estados Unidos para recuperar el cuerpo y poder darle sepultura, más de seis meses después del crimen. En declaraciones a Somos Noticias, había señalado que encontró resistencia por parte de la funcionaria judicial, quien adelantó que iba a pedir un tercer informe sobre las lesiones, a pesar de la contundencia de lo expresado por los peritos de parte. La familia cuenta con el patrocinio de la Dra. Sofía Sanjurjo.