El Museo Paleontológico de San Pedro ha anunciado el descubrimiento del segundo ejemplar de armadillo gigante del género Doedicurus con su escudo o casquete cefálico totalmente completo. Este hallazgo, sin precedentes en 120 años, se realizó en un sector de barrancas ubicado en un campo propiedad de la firma arenera Spósito S.A., donde el equipo del museo ha estado trabajando durante 23 años.
El fósil fue extraído de una capa sedimentaria que se formó a finales de la edad Ensenadense, hace unos 500.000 a 700.000 años atrás. El equipo que recuperó el ejemplar estuvo integrado por José Luis Aguilar, Jorge Martínez, Augusto Moleón, Walter Parra y Julio Simonini, del Museo Paleontológico “Fray Manuel de Torres”; el Dr. Luciano Brambilla y el Lic. Damián Ibarra (Centro de Estudios Interdisciplinarios-Universidad Nacional de Rosario), junto al técnico Santiago Pallero.
"Estamos muy contentos con el hallazgo de este animal. Su estado de conservación es impresionante, incluso presenta partes del cuerpo articuladas en posición de vida", explicó José Luis Aguilar, director del Museo Paleontológico de San Pedro y uno de los descubridores. "Si bien aún estamos en pleno proceso de excavación y acondicionamiento del material, creemos que este ejemplar podría ser el de mayor número de piezas para esa antigüedad".
La pieza "estrella" del hallazgo es el fantástico escudo que este animal desarrolló en su cabeza y que pudieron recuperar intacto. Es casi circular, mide unos 38 centímetros de diámetro y una pulgada de espesor. Está formado por placas individuales pero articuladas entre sí, que formaban una coraza muy resistente sobre el cráneo del animal.
"Saber que es el segundo escudo completo de la especie recuperado en Argentina; que hacía 120 años que eso no sucedía y que el único anterior fue encontrado por Carlos Ameghino, nos emociona y nos llena de satisfacción. Es un hallazgo prácticamente histórico para la fauna del Pleistoceno", agregó Aguilar.
Para el Dr. Luciano Brambilla, partícipe del hallazgo, "El ejemplar descubierto en San Pedro se convierte posiblemente en el más completo de su género para la edad Ensenadense, ya que presenta una cantidad excepcional de partes esqueletales preservadas, incluido su raro escudo para proteger el cráneo".
Este nuevo fósil, con su escudo cefálico en forma de plato, de superficie irregular, con pequeñas protuberancias y perforaciones, revela un aspecto poco explorado de la anatomía de Doedicurus y permite analizar con detalle las características de esta estructura delicadamente preservada. El análisis de su superficie sugiere que en la parte posterior de la cabeza pudieron desarrollarse protuberancias o espinas como mecanismo de protección, lo que aporta información novedosa sobre la evolución y adaptación de la especie a su entorno.